29 de julio de 2012

JAMES SALLIS: MARIPOSA DE NOCHE


James Sallis (Arkansas, 1944) es novelista, ensayista, musicólogo y profesor de literatura. Es el autor de Drive y de las novelas protagonizadas por el detective Lew Griffin. Mariposa de noche (Moth, 1993) es la segunda novela de esta serie.
En El tejedor leímos cómo el detective Lew Griffin superó su adicción al alcohol y llegó a ser novelista de éxito y profesor universitario.  Conocimos, también, a La Verne y a Vicky, las mujeres de su vida.
En Mariposa de noche La Verne ha muerto y su última pareja quiere contratar a Griffin para que busque a Alouette, la hija secreta (“nunca conocemos a nadie”) que La Verne tuvo con su primer marido, influyente doctor.
El “negrata Lew” acepta el encargo a pesar que quiere dejar atrás su pasado y de que está convencido de que es demasiado viejo para recuperar su antigua profesión. Tras recorrer las tierras donde nació el blues, y aunque el asunto se le va de las manos, localiza a Alouette y a la hija que acaba de tener y abandonar: un bebé prematuro a causa de la adicción a las drogas de su madre.
Mariposa de noche es una excelente novela narrada con indudable maestría. James Sallis supera con nota sus propios retos.  ¿Cómo, si no, se puede hacer creíble y humano a un violento y autodestruido detective negro de Nueva Orleans que llega a ser escritor y profesor universitario, que cita a Camus, Chejov o Dostoievski, y que reflexiona sobre la existencia, sobre el peso de la culpa que todos arrastramos, sobre la identidad humana y sobre la pérdida de las personas queridas?

Magnífico James Sallis.A por la siguiente: El avispón negro (RBA, Serie Negra).

JAMES SALLIS: Mariposa de noche, RBA, Serie Negra, mayo de 2012

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20 de julio de 2012

MAJ SJÖWALL Y PER WAHLÖÖ: LOS TERRORISTAS


Los terroristas (Terroristerna, 1975) es la décima y última novela escrita por Maj Sjöwall (1935) y Per Wahlöö (1926-1975).
Uno de los puntos de interés de la lectura de las novelas protagonizadas por el inspector Martin Beck es comprobar cómo progresivamente van ganando peso las tesis críticas de sus autores. Si en las primeras novelas de la serie el enigma policial tiene prioridad sobre la denuncia social, poco a poco la situación se va invirtiendo.
En Los terroristas, la trama, muy esquemática, se subordina a la virulenta crítica que Maj Sjöwall y Per Wahlöö realizan del Estado del bienestar sueco.
La justicia es ridiculizada mediante el esperpéntico juicio a una joven atracadora de un banco. Mientras tanto, la operación policial montada para proteger a un senador estadounidense que visita Suecia acaba en el más absoluto desastre con la muerte del jefe de gobierno de la nación. Qué esperar de una policía estatal  que aparece “como una colección de matones corrompidos e ignorantes, o como un rebaño de bobos uniformados con una dirección estúpida y desconsiderada.” ¿Y la policía secreta? La SAPO es retratada “bajo el signo de la ridiculez y de la payasada.” Y, para completar el puzzle, un gobierno socialdemócrata que “había llegado a no ser ni socialista ni democrático.”
En conjunto, las diez novelas de Maj Sjöwall y Per Wahlöö constituyen una referencia imprescindible para entender la evolución de la novela policiaca europea de las últimas décadas.


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12 de julio de 2012

MAJ SJÖWALL Y PER WAHLÖÖ: MUERTE DE UN POLICÍA


Maj Sjöwall (1935) y Per Wahlöö (1926-1975) escribieron entre 1965 y 1975 diez novelas que revolucionaron el panorama de la literatura policiaca nórdica. Muerte de un policía (Polismördaren, 1974) es la novena novela protagonizada por Martin Beck.
En esta ocasión Martin Beck y Lennart Kollberg se desplazan a un pueblo del sur de Suecia para investigar la desaparición de una mujer divorciada de treinta y ocho años. Allí, casualmente, los dos policías se reencuentran con los protagonistas de sus primeros casos (Roseanna y El hombre que se esfumó).
Coincidiendo con el descubrimiento del cadáver de la desaparecida se activan todas las alarmas en el Cuerpo de Policía cuando dos agentes son acribillados a balazos, y un tercero herido, por unos jóvenes ladrones. Beck y  Kollberg encontrarán el nexo entre los dos sucesos.
En lo personal, Martin Beck, tras su separación, consolida su relación sentimental con Rhea Nielsen (a quien conoció en La habitación cerrada), una mujer que “había cambiado su vida y le había dado más satisfacciones que veinte años de matrimonio.”
La crítica de los autores a la organización policial (habitual en toda su obra) se concreta en esta novela en la dimisión de Lennart Kollberg, argumentada de esta forma: “Al cabo de veintisiete años de servicio, me siento tan avergonzado de mi profesión, que mi conciencia ya no me permite que siga practicándola.” A pesar de su retirada, volveremos a encontrar al personaje en Los terroristas, la despedida de la serie.

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10 de julio de 2012

GEORGE PELECANOS: EL JARDINERO NOCTURNO


En El jardinero nocturno (The Night Gardener, 2006) George Pelecanos retoma sus temas favoritos: las calles del Distrito Columbia, la familia, los conflictos multirraciales, las ilusiones, los sueños rotos, la implacable vida que hay que vivir con la mayor honestidad posible…
En 1985 dos jóvenes agentes de uniforme y un detective de Homicidios coinciden durante el hallazgo en un jardín del cuerpo de un adolescente negro residente en un barrio pobre. Se trata de la tercera víctima del conocido como Asesino Palíndromo (según los periodistas) o Jardinero Nocturno (según el departamento de policía). 
Veinte años después las vidas de los tres policías han seguido caminos muy diferentes. Gus Ramone es sargento detective de Homicidios. Dan "Doc" Holiday dejó el cuerpo cuando fue sometido a una investigación interna. Por último, T. C. Cook está retirado (aunque no existen los policías retirados, según él) tras un accidente cardiovascualar.
A pesar de ello, cuando varios adolescentes negros cuyos nombres son palíndromos son asesinados los tres deciden trabajar juntos para investigar al principal sospechoso de los crímenes.
George Pelecanos narra sin interferir en sus personajes, sin hacer juicios morales, reflejando la realidad como aquel espejo a lo largo del camino que propuso como canon Stendhal.
Espléndida novela.

George Pelecanos: El jardinero nocturno, Ediciones B, 2009.



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